NUESTRO PUENTE

Nuestro puente abraza el Cua,

nuestras alegrias y penas tambien
el me recuerda,
la alegría tras la pena.
Pasan los días y pasan las pena,
ni los amores, ni el tiempo regresan,
soñando bajo el puente, sigue el Cua.

En estos tiempos de controversia, insultos, dudas hacia nuestros ediles, nuestro puente sigue hay fiel a su papel de testigo fiel de la historia de nuestro pueblo. Ha visto con el paso de los años el paso de Astures, Romanos, Franceses, Ingleses que han dejado un trozo de historia en nuestra tierra.
Desde tiempos romanos existía un puente de fabrica, del cual por motivos de crecidas y los medios de aquellos tiempos no nosquedan vestigios.   Castro Ventosa fue durante casi diez años residencia de Plinio el Viejo, constituyendo un importante punto de la vía Nova (Braganza-Astorga) atravesaba el río, cruzaba por el Sur y se dirigía a Ponferrada,  asía como la vía Lugo-Astorga, estableciéndose sobre el río Cua no sólo un puente de paso, sino también una red de alcantarillado para evitar las posibles crecidas del curso fluvial.
De la época Medieval, sólo nos quedan unos restos en el margen izquierdo, estos restos corresponden a la época en que Gelmirez fundó la iglesia de Santa María.
En el siglo XIX nuestro puente tubo una especial transcendencia histórica con la batalla entre ingleses y franceses el tres de Enero de mil ochocientos nueve.
Nuestro Puente como hoy lo conocemos despues de sucesivas reformas obligadas por el paso del tiempo, data de los siglos XVI y XVIII.